¿Qué es el ácido úrico elevado o hiperuricemia?
El ácido úrico es el producto final del metabolismo (catabolismo) de las purinas en humanos, el cual cristaliza fácilmente. Se produce principalmente en el hígado y se excreta (aproximadamente un 70%) por los riñones.
La producción endógena de ácido úrico a partir de la degradación de las purinas supone dos tercios del acúmulo corporal de urato, siendo el resto de origen dietético.
La hiperuricemia es un trastorno del metabolismo de las purinas, en el que se acumulan en la sangre cantidades anormalmente altas de ácido úrico debido a la disminución de la eficiencia del aclaramiento renal de urato.
Las hiperuricemias pueden generar diferentes cuadros patológicos: la gota es una enfermedad de las más prevalentes.
¿Qué son las purinas?
Las purinas (adenosina y guanosina) son componentes de los ácidos nucleicos, por lo que forman parte de todas las células, vegetales o animales.
El organismo sintetiza las purinas de forma suficiente para cubrir las necesidades por eso las purinas no se consideran esenciales de la dieta (no se ha visto lo mismo en pacientes críticos).
Existen diferentes vías para proveer las purinas necesarias para la síntesis celular, las más importantes de las cuales son la síntesis de novo y el reciclaje. La mayor parte de las purinas son catabolizadas a uratos tras su absorción.
¿Qué es la gota?
La gota es una enfermedad por depósito de cristales en la que los síntomas se producen por la formación de cristales de urato monosódico (MSU) en las articulaciones y los tejidos blandos. La precipitación en las articulaciones produce una artritis relativamente característica. También puede favorecer, además, el desarrollo de una nefropatía asociada y la formación de cálculos en las vías urinarias.
La gota afecta mayormente a hombres sobre todo de avanzada edad. Aunque también puede darse en mujeres (con mayor frecuencia en mujeres posmenopáusicas en comparación con mujeres jóvenes).
¿Por qué puede aumentar el ácido úrico en sangre?
En el aumento del ácido úrico sanguíneo intervienen varias posibles causas que pueden actuar aisladas o asociadas:
- Factores genéticos que aumentan la oferta catabólica de purinas.
- Disminución del aclaramiento de uratos.
- Disminución del aclaramiento asociado a la producción de ciertos metabolitos (ácido láctico, cuerpos cetónicos) y hormonas (angiotensina y vasopresina).
- Obesidad.
- Consumo de alcohol.
- Ejercicio exagerado.
- Ingesta elevada de purinas.
- Quimioterapia antineoplásica.
- La hipertensión arterial también se asocia a una baja excreción de ácido úrico.
Dieta para hiperuricemia o ácido úrico elevado
La hiperuricemia o ácido úrico elevado y más en concreto la gota ha sido asociada durante mucho tiempo a unos hábitos de vida opulentos con excesos de carne y alcohol.
Se asocia a mayor riesgo de hiperuricemia:
- Con un mayor consumo de carnes rojas (buey, cerdo y cordero) y de mariscos.
- Consumo de alcohol, en particular la cerveza (ya que es rica en purinas).
- El consumo de fructosa, tanto de origen natural como en forma de refrescos edulcorados con sirope de maíz rico en fructosa,
Se asocia con un menor o nulo riesgo de hiperuricemia:
- Consumo de proteínas de origen vegetal.
- Las dietas ricas en hortalizas ricas en purinas (alubias, guisantes, lentejas).
- Las dietas ricas en productos lácteos desnatados y con suplementos de vitamina C.
- El consumo de café, no el de té verde, se asocia a niveles más bajos de urato sérico.
Recomendaciones nutricionales para la hiperuricemia
Se deben respetar las siguientes consideraciones:
- Seguir un menú equilibrado:
- Evitando alimentos ricos en purinas
- Ingesta limitada de alimentos de origen animal
- Evitar alcohol
- Consumo reducido en fuentes de fructosa (refrescos y zumo endulzados, caramelos y masas dulces).
- Dieta calóricamente adecuada (para alcanzar o mantener un peso aceptable).
- Evitar períodos de ayuno prolongado (aumenta la concentración de ácido úrico).
- Proveer líquidos abundantes (para propiciar un adecuado flujo urinario).
- Reducción de peso (en caso de existir un exceso enlace interno a un artículo de obesidad).
Dieta para la hiperuricemia
Os dejamos menú para un día, pero como ya hemos mencionado además de restringir ciertos alimentos también habría que tener en cuenta el etiquetado de los alimentos.
Desayuno | Leche y tostada con aceite de oliva |
Almuerzo | Fruta |
Comida | Arroz con verduras y especias al gusto (P.e: albahaca) |
Merienda | Yogur con fresas |
Cena | Revuelto de calabacín y cebolla |
¿En qué alimentos puedes encontrar purinas?
En esta tabla se puede consultar las concentraciones de purinas de ciertos alimentos, recogiéndose desde concentraciones más elevadas hasta cantidades más pequeñas las cuales no necesitan limitarse:
GRUPO A: concentraciones elevadas (150 – 100 mg/ 100 g) |
Hígado |
Riñones |
Mollejas (lecherillas) |
Sesos |
Corazón |
Anchoas |
Sardinas (en aceite) |
Extractos de carne |
Consomé |
Salsas de carne |
Huevas de pescado |
Arenque |
GRUPO B: cantidades moderadas (50 -100 mg/100 g) |
Carnes de caza y pescados (distintos a los mencionados en el grupo A) |
Aves |
Lentejas |
Cereales integrales |
Frijoles |
Espárragos |
Coliflor |
Hongos |
Espinacas |
GRUPO C: cantidades muy pequeñas que no necesitan limitarse en la dieta de personas con gota |
Verduras distintas a las ya mencionadas |
Frutas de cualquier tipo |
Leche |
Quesos |
Huevos |
Cereales, espagueti y macarrones refinados |
Azúcares y dulces |
Café |
Té |
Chocolate |
Bebidas carbonatadas |
Tapioca |
Levadura |
Sopas de verduras |
(Tabla: Lutz C, Przytulski K. Nutrición y dietoterapia. 5a ed. Mc Graw- Hill; 2011)
BIBLIOGRAFÍA:
Mahan LK, Raymond JL. Krause Dietoterapia. 14a ed. Elsevier; 2016. 1152 p.
Salas-Salvadó J. Nutrición y dietética clínica. 2a. Elsevier Masson; 2008. 704 p.
Lutz C, Przytulski K. Nutrición y dietoterapia. 5a ed. Mc Graw- Hill; 2011.