Es importante tener en cuenta y recalcar que los pies diabéticos pueden aparecer como consecuencia de la diabetes. Son un aspecto un tanto desconocido de la enfermedad, y eso necesita una solución. En este artículo hablaremos de los síntomas, las causas, y el tratamiento que se puede llevar a cabo para tratar de mejorar la situación de cada caso.
Qué son los pies diabéticos
Según la Clínica de la Universidad de Navarra (que actualmente es el único centro médico del país que tiene su propia unidad de pie diabético), el pie diabético se manifiesta “cuando existen niveles inadecuados de glucosa en sangre y otros factores que concurren con frecuencia en personas con diabetes (hipertensión arterial, hipercolesterolemia, …) que provocan un daño en los vasos y nervios que pueden producir complicaciones a medio-largo plazo”.
Las infecciones o úlceras provocadas por el pie diabético son muy serias y, como tal, hay que tratarlas. De hecho, se hace completamente necesario prestar atención a esta posible infección porque, en caso de ser grave, las consecuencias podrían ser muy serias; estamos hablando de llegar hasta a la amputación. Es decir, daños en los vasos sanguíneos como apuntábamos más arriba también significa que los pies no reciben ni la sangre ni el oxígeno suficientes como para poder funcionar de manera normal.
Podría interesarte este artículo sobre la diabetes tipo 1.
Podría interesarte este artículo sobre la diabetes tipo 2.
¿Cuáles son los síntomas de los pies diabéticos?
Veníamos explicándolo un poco más arriba: el síntoma principal de la aparición del pie diabético es la úlcera. Sin embargo, existen otros signos que indican el pie diabético, como pueden ser los siguientes:
- ausencia de sensibilidad en los pies
- hormigueos y calambres
- transformación de heridas en úlceras
En realidad, todos estos síntomas están íntimamente relacionados entre sí. Una menor sensibilidad (y, por consiguiente, mala circulación de la sangre en el pie) puede acabar desembocando en úlceras, que a su vez pueden derivar en una amputación. Al mismo tiempo, será la ausencia de sensibilidad la que provoque heridas en los pies.
Podría interesarte este artículo sobre la prediabetes.
Es por eso que, si presentas alguno de estos síntomas, lo más sensato es que acudas directamente a un especialista para, primero, diagnosticar si es que se trata de pie diabético, y segundo, evitar que el problema vaya a más.
Causas de los pies diabéticos
Principalmente, el pie diabético aparece cuando los niveles de glucosa están descontrolados, aunque existen otros factores relacionados con su desarrollo. Son los daños provocados en los vasos sanguíneos y en los nervios, los que pueden causar problemas realmente graves en las extremidades de las personas que sufren de pie diabético.
Igual que hay ciertos síntomas que advierten de la presencia del pie diabético, son también varias las causas que lo originan.
- Enfermedad vascular periférica. En otras palabras, esto significa que las arterias de las extremidades inferiores se ven afectadas.
- Neuropatía periférica. Es la culpable de la alteración de la sensibilidad y también del sistema motor; todo ello directamente relacionado con los síntomas del pie diabético.
- Inmunopatía. O lo que es lo mismo, una alteración de la función leucocitaria que aparece en consecuencia de la hiperglucemia.
Tratamiento a través de la alimentación
En realidad, todos los esfuerzos deberían enfocarse a la prevención y no al tratamiento del pie diabético. En cualquier caso, el tratamiento pasa por una combinación de factores entre los que se encuentra, por supuesto, la alimentación. Repetiremos una y otra, y otra vez que una dieta equilibrada y con la cantidad justa de alimentos recomendados (porque ya hemos visto que hay ciertos ingredientes que son beneficiosos para las personas con diabetes, y hay tantos otros que es mejor evitar).
Podría interesarte este artículo sobre los 10 alimentos recomendados para la diabetes.
Podría interesarte este artículo sobre los 10 alimentos prohibidos para la diabetes.
Además de eso, otros tratamientos pasan por reposar y evitar forzar el pie más de lo recomendado, limpiar las posibles úlceras que hayan podido aparecer e incluso tomar algún tipo de medicamento. En casos extremos, a veces la solución más acertada es la intervención quirúrgica.
Recomendaciones nutricionales
Somos lo que comemos; nunca mejor dicho. En asuntos relacionados con la diabetes en cualquiera de sus formas, como puede ser el pie diabético, la alimentación juega un papel vital. Bien es cierto que el pie diabético en sí y todo lo que conlleva tiene otro tipo de tratamientos (como decíamos un poco más arriba, reposo, medicamentos y hasta cirugía).
Lo más probable es que te surja alguna duda de más; es normal. Si alguna de estas tiene que ver con la alimentación, puedes contactar con nosotros y agendar una cita con nuestros/as especialistas. ¡Estarán encantados/as de resolverlas todas!
